Mujeres son denunciadas por luchar contra abuso sexual

NICARAGUA
Adital -
El caso de nueve mujeres que fueron denunciadas por acompañar el aborto terapéutico de una niña de 9 años violentada por el padrastro, hizo que el Movimiento Contra el Abuso Sexual se manifestase. Las mujeres fueron denunciadas al Ministerio Público por la Asociación Nacional Pro Derechos Humanos, una institución considerada conservadora por diversos movimientos nicaragüenses.
Luisa Molina, Ana María Pizarro, Martha María Blandón, Martha Murguía, Violeta Delgado, Mayra Sirias, Juana Jiménez, Lorna Norori y Yamileth Mejía fueron denunciadas por encubrir violación; cometer delito contra la administración de justicia, asociación e instigación para delinquir; y hacer apología del delito de aborto. Esta última denuncia fue realizada porque ellas acompañaron el aborto terapéutico de "Rosita", niña de 9 años, que fue violentada por el padrastro y quedó embarazada -el padrastro fue condenado a 30 años de prisión.
En manifiesto, el Movimiento destaca que "proteger a las niñas que sufren abuso sexual no es un delito, es una obligación". En Nicaragua, según datos del Anuario de la Policía Nacional 2006, cada 2 horas 14 minutos es cometido un delito sexual, lo que significa que son 11 personas las que sufren delitos sexuales por día, y más de la mitad de esas víctimas tienen menos de 18 años.
La organización de lucha contra el abuso sexual recuerda que la condena injusta de las nueve nicaragüenses puede tener graves implicaciones sociales y afectar las relaciones de trabajo y de coordinación que necesita la relación entre el Estado y la sociedad civil para enfrentar esa violencia. "Lo peor es que, al final, las mayores perjudicadas serán nuestras niñas, que estarán más vulnerables a los verdaderos responsables de los abusos sexuales".
"Es inconcebible y lamentable que se denuncie a esas mujeres, que basadas en el principio fundamental de creer en las víctimas y amparadas en la ley, acompañaron a la niña pensando solamente en proteger su integridad física y emocional. El acompañamiento que realizaron no sólo con Rosa, sino con muchas niñas, adolescentes y mujeres que pasaron por tan dolorosa experiencia", expresa el Manifiesto.
El Manifiesto del Movimiento exige que el Estado garantice la protección de las niñas y adolescentes en situación de abuso sexual, con atención integral; que el Ministerio Público no dé trámite a esta denuncia y se abstenga de ejercer cualquier acción judicial, ya que debe centrar sus esfuerzos para asegurar que los reales violadores sexuales sean condenados, "no es ético que inviertan los recursos y persigan a quienes luchan para erradicar ese delito".
Además, el Movimiento llama a cada mujer y a cada hombre nicaragüense a romper con la cultura del silencio, a fin de no convertirse en cómplices y testigos mudos ante los miles de casos de abuso sexual. A los medios de comunicación, el Movimiento les pide que eleven sus voces de respaldo a las denunciadas y de protesta ante el Estado, para que no se dé proseguimiento a esa denuncia.
Traducción: Daniel Barrantes - barrantes.daniel@gmail.com
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